Siendo madre, esposa, hija, hermana, nuera, tía, cuñada, amiga, trabajadora... cómo mantenerme mujer.

martes, 18 de noviembre de 2008

Manual para educar (I)

A todo el que se decide a tener hijos le digo lo mismo. Hay muchísimas formas de educar, de esas muchísimas hay algunas buenas, y algunas no tan buenas. Nosotros hemos elegido los valores que queremos transmitir a nuestros hijos, algunas cosas las hacemos genial y otras cosas las hacemos fatal.
Lo que sí me parece importantísimo es ser consciente de la elección que hemos hecho, para poder ser consecuentes y educar lo más coordinados que podamos, ya que cuando estamos con los niños, debemos tomar (más o menos) unas veinte decisiones rápidas por minuto, de mayor o menor importancia, y cada una de estas decisiones nos acerca o aleja del camino al que queremos llevarles.
Procuro no criticar las elecciones de otros padres, precisamente porqué sé que hay muchas formas de hacerlo y todas pueden ser buenas, aunque diferentes, y que a la hora de ponerlo en práctica todos podemos meter la pata.

Pues resulta que últimamente me he sentido criticada por padres o educadores que eligen otra forma de hacer las cosas.
Nuestra elección ha sido inculcar el valor del trabajo (entre otros), y qué mejor manera de hacerlo que con el ejemplo. Con mucho esfuerzo y mucha organización, ninguno de los dos ha tenido que renunciar a su carrera profesional, y por supuesto ninguno de los dos ha tenido que renunciar a disfrutar del cuidado y la educación de nuestros hijos.
Jamás he criticado la elección de muchas amigas de dejar de trabajar, pedir excedencias o renunciar a sus carreras profesionales, porque su decisión me parece tan buena como la mía, porque está tomada bajo otras circunstancias y sobretodo en el amor a sí mismas y a sus hijos.
Pues resulta que hay madres que piensan que las madres que trabajamos somos unas malas madres, que sólo queremos desentendernos de nuestros hijos, y que como resultado son unos maleducados.
Hay artículos y blogs que hablan de la separación entre los niños y sus madres como algo que habría que evitar a toda costa, para que los niños no tengan un trauma psicológico cuando crezcan.
En la misma guardería de mi hijo pequeño nos pidieron que durante el mes de septiembre le lleváramos sólo un par de horas por la mañana por el tema de la aclimatación a la guardería después del verano.

Tengo dos niños estupendísimos, educadísimos, sanísimos y felices. Y además espero poder hacer de ellos hombres muy trabajadores y respetuosos con las decisiones de los demás.

7 comentarios:

Unknown dijo...

Estoy contigo: el respeto me parece, de siempre, uno de los valores fundamentales en la vida.

Nosotros elegimos que mi mujer se quedase al cuidado de los niños, aunque ahora la crisis económica nos está haciendo replantearnos las cosas... pero en cualquier caso, no juzgamos (ni se nos ocurriría) a quienes han optado por otras alternativas.

Un besote

Pegasus 21 dijo...

muy bueno tu artículo, me siento identificado con tu visión de la educación de los chicos y como el entorno critica talo cual decición; ojo, no digo que alla malas intencinones; para el caso escucho consejos. mi mujer y yo estamos planiando tener niños y lo que escribiste me fortalece en esa decición.

Luna dijo...

Cuidé 7 años a dos hermanos. Sus padres trabajaban, te diría que incluso la madre más. Son dos de los niños mejor educados y queridos que conozco.

Creo que lo importante es la calidad de tiempo que deciques a tus hijos no la cantidad.

Saludos.

Io dijo...

Hola camaleona:

Como madre soltera, difícilmente podía yo quedarme al cuidado de mi hija mientras crecía. ¡Qué mas hubiese querido yo!

Durante años, tuve que trabajar con un horario muy esclavo, a veces hasta las 10 de la noche.

Por suerte, mi hija contó con sus abuelos hasta la edad de 9 años, después tuvo que aprender a desenvolverse por sí misma, aunque yo acorté mis horarios y la dejaba sola el menor tiempo posible.

Al día de hoy es una mujer sana, que comprende el sacrificio que tuve que hacer, que valora el trabajo bien hecho y ayuda a sus compañeros de empresa cada vez que se lo solicitan.

No creo que existan ese tipo de incompatibilidades si el tiempo en que se está con ellos se aprovecha bien.

Enhorabuena por tus dos niños estupendísimos, educadísimos, sanísimos y felices.

No creo que nunca dejen de serlo.

Un beso y un abrazo.

P.D. Gracias por pasarte por mi blog.

Pugliesino dijo...

Admirable tu entereza y como sin dejar de respetar todas las opciones (que deberían respetar la tuya igualmente) luchas por defender la tuya sin que ello disminuya un ápice el amor y el cuidado de tus niños.
Seguro que crecerán llevando consigo tan buenos valores.
Enhorabuena!

Un abrazo y gracias por la visita.

encantadadelavida dijo...

Tengo tres hijos y con cada uno he seguido una fórmula distinta. Con mi mayorzota de 5 años optamos por guardería. Con mi machote de tres años preferimos chica en casa y con la peque de 6 meses he optado por quedarme en casa. No soy mejor madre ahora pese a que hay quien me aplaude la decisión e insinúa que ahora sí que soy una madre estupenda. No nos engañemos. La decisión no la he tomado por la niña. La he tomado por mi. La niña hubiera crecido sana y feliz igualmente en guardería (convenientemente elegida) o con alguien de confianza que se hiciera cargo de ella.

Camaleona dijo...

Mario Alonso, siento que sea la crisis la que hace que os replanteéis cómo cuidar de vuestros hijos.

Pegasus21, para lanzarse a la aventura de ser padres hay que estar MUY convencido, pero con ganas y esfuerzo, creo que se puede sin necesidad de renunciar a demasiadas cosas.

Luna, yo también creo que lo importante es la calidad del tiempo que se pasa con ellos. Si los niños que cuidaste son educados y queridos en parte es gracias a ti, suerte que te encontraron.

Io, un ole por las personas como tú, que sin tener los recursos tiran adelante y sacan lo mejor de sí mismos, y sobretodo de los demás...

Carlos, muchas gracias por tu ánimo, con la educación de nuestros hijos tenemos que parecer muy seguros, pero hay veces que tenemos dudas, y muy gordas.

Mmarde, bonita, cada uno hace lo que puede y como puede y en las circunstancias que se dan en cada momento ¿verdad?

Muchas gracias a todos por vuestros comentarios...

este es el diario

de una madre, esposa, hija, hermana, nuera, tía, cuñada, amiga, trabajadora... que intenta seguir siendo y sintiéndose MUJER